jueves, 29 de abril de 2010

Navegando en un Noray 38


Esta entrada se la dedico a mi nuevo amigo Jorge F.

Mejor dicho Dr. F.

Bajo un rostro curtido por el sol y muchas horas en el mar, se dibuja una sonrisa de hombre feliz. Sobretodo cuando está a bordo de su Noray 38. Se trata de un hombre culto pero sencillo. Que se nota que disfruta con el momento presente... me di cuenta enseguida. Nos invitó a Cristina, a Teresa, a mi hijo Marc y a Francesc, un compañero mío de la academia donde estudiamos Capitán de Yate, para pasar medio día navegando juntos.

Quedamos a las 10.30 am en el Port Marítim donde tiene amarrado el velero. Previamente acordamos que Francesc traería fruta abundante. Teresa se encargaba del pica-pica, Jorge de los sándwiches y nosotros del vino y agua.

Jorge me llamo cuando estábamos de camino al Port Marítim. Por lo visto en el establecimiento donde encargo los sándwiches el día anterior no los tenían aún preparados.... No te preocupes - le conteste - no tenemos prisa. Cuando llegamos al Marítim nos encontramos con Francesc, dispuesto y preparado para navegar. Mientras esperamos al armador del barco nos tomamos un café i un bocadillo comentando diferentes temas.

El día era bastante soleado. Buen clima y viento térmico.

Desde el mar luego divisamos esa neblina llamada POLUCIÓN.
Por fin llega Jorge y subimos todos a bordo. Todos incluido nuestro perro Idefix.
Mientras calentamos el motor, que arranco a la primera, colocamos bien las bolsas de mano.

Esperando para salir en el puente de las 12.30 pm (para salir del Portvell o Port Marítim de Barcelona en velero o en un barco de considerable puntal, hay que esperar a las horas en punto y a las medias). La espera esta vez no se hace larga, tenemos que hacer casi parados un par de maniobras. Por fin se escuchan unas pitadas seguidas y se abre el puente. Cuando el puente levadizo se abre se separa en dos partes que giran hacia fuera. La gente nos mira desde arriba. Algún turista inquieto de un souvenir nos hace una foto.

Una vez fuera propongo navegar hacia las costas del Garraf. Hace tiempo que no voy por allí. Lo cierto es que navegamos rumbo sur. Jorge me contesta algo así como: ….que más quieres ver - señalando la delgada línea del horizonte. Es cierto, doy la vuelta y me doy cuenta que casi no se ve la costa.

Al cabo de dos horas verifico por primera vez nuestra posición GPS. Vamos rumbo sur y a unos siete nudos de promedio ¡no está mal!.

Todo el mundo coge la rueda incluso mi amiga Teresa (que me conto que sólo había navegado de noche).

No hubo una hora oficial para la comida, de echo todo el mundo comió y bebió cuando tenía ganas. Para esto serviría el eslogan “Bienvenidos a la República Independiente del…armador.

Sobre las 4.00 pm, hago con el Gps un Go to al puerto de Pollensa. Estamos a rumbo y a 92 millas.

Algún mareo leve a bordo pero todo controlado.

Decidimos que es hora de dar la vuelta y después de virar arrumbamos de nuevo al Port Vell de Barcelona.

Me pongo a la rueda y discutimos amistosamente con mi compañero Francesc cual es el mejor rumbo.

Se nos mantiene estable el garbí. Después de probar tres barbaridades y media decido hacer rumbo directo (NW) hacia el puerto.

Mi hijo Marc decide hacer sus primeras doce millas a la rueda de un velero y el armador parece estar de acuerdo (prefiero no saber lo que pensaba).

Mirando de vez en cuando el Gps (y la autopista de rumbo al waypoint de llegada), el niño de once años mantiene rumbo estable. Al padre del niño se le cae la baba.

Sobre las 18.30 UTC, el viento está amainando rápido de intensidad y recurrimos al motor.

Volvemos a navegar a seis nudos y vemos costa.
Jorge, el patrón, hace los honores y nos entra al puerto de regreso.

Tengo la impresión de que todos lo pasamos muy bien.

Las conversaciones a bordo fueron muy dispares pero interesantes. Creo que la conclusión a la que llegó Jorge, en un momento de la travesía, fue aplastante: ....Deja de tocarlo todo y disfruta del momento... ¡Tiene razón!

Gracias a todos,

Un saludo,

jueves, 22 de abril de 2010

Regata New York Barcelona 21/04/2010

Tuve la suerte de poder estar ahí...
Tuve la suerte de poder participar en la llegada de los dos barcos (Estrella Damm y W Hotels) en la Regata New York-Barcelona.
Fue una madrugada muy compleja puesto que las condiciones de visibilidad por niebla eran escasas.
Recuerdo que en una ocasión nos cruzó un barco por delante, como aquel que se salta un ceda el paso en una ciudad, y te das cuenta justo cuando ya ha pasado por delante tuyo... ¡que susto! También recuerdo que cuando entramos al puerto de Barcelona, lo supimos porque estuvimos a punto de chocar contra una roca, y lo que nos alarmó fue la luz verde del faro de señalización de entrada al Port Vell. Pero me quedo con lo mejor. Poder acompañar en su navegación, más de media milla, al Estrella Damm, el ganador.

Para mi fue muy emotivo cuando encendieron una bengala roja aproximadamente a 0,50 millas de la línea de llegada. Los aplausos, en definitivas cuentas, la emoción de la llegada después de doce días y seis horas.

Esta entrada va dedicada, especialmente, a Ricky, mi maestro...
http://www.ny-bcn.org/video-gallery.jsp#28d6e69fd3a597473353811788895a5f

jueves, 15 de abril de 2010

Vacaciones Semana Santa " 03-2010"

Apreciados Amigos:

Empiezo mi ciberdiario náutico, en el que os informaré de todo lo relacionado con el mundo de la vela y la náutica: mi pasión.

Para no andarnos con más rodeos, inicio mi diario de bitácora con nuestro viaje a Palma en Semana Santa.

Después de unas semanas muy moviditas de trabajo y estudios... decidimos ir a Palma invitados por nuestro amigo Xavi para relajarnos, descansar y navegar. ¡Creo que lo mereciamos! Os dejo unas fotos de mi primera entrada en el diario.

http://picasaweb.google.es/solutionsgroupbcn/SemanaSanta2010#